Zoocriadero de Cocodrilos (Tumbes)

El Zoocriadero de Cocodrilos en Tumbes es una visita obligatoria para los amantes de la vida salvaje. A pesar de que algunos visitantes han señalado que el lugar parece algo descuidado, no te dejes engañar por las apariencias. La verdadera joya de este lugar es la oportunidad de ver de cerca a estos magníficos reptiles en su hábitat natural. Además, el recorrido en lancha hasta llegar al criadero es una experiencia fascinante, rodeado de un hermoso paisaje y la tranquilidad que ofrecen los manglares de Puerto Pizarro. Antes de planificar tu visita, asegúrate de verificar las mareas, ya que esto puede afectar el acceso al criadero. Si la marea está muy baja, puede que tengas que esperar un tiempo para poder ingresar.

Si estás buscando una experiencia única y emocionante, el Zoocriadero de Cocodrilos es definitivamente una excelente opción. Aunque algunos visitantes han comentado que el recorrido interno es bastante pequeño, lo compensa con creces la oportunidad de aprender sobre la vida y el comportamiento de estos increíbles animales. Además, el paisaje que rodea el criadero es simplemente impresionante. Sin embargo, ten en cuenta que algunos visitantes han mencionado que se debería tener mayor cuidado al utilizar los flotadores disponibles en el lugar. Asegúrate de seguir todas las indicaciones y precauciones proporcionadas por los guías, para garantizar una experiencia segura y memorable.

Si estás buscando una experiencia excepcional en contacto con la naturaleza, no puedes dejar de visitar el Zoocriadero de Cocodrilos en Tumbes. A pesar de que algunas reseñas mencionan que las instalaciones podrían mejorar, lo que realmente cautiva a los visitantes es la oportunidad de ver de cerca el impresionante crecimiento de estos animales. El lugar cuenta con más de 300 ejemplares de diferentes tamaños, desde pequeños cocodrilos de apenas 30 centímetros hasta imponentes reptiles de hasta 5 metros de longitud. La exhibición de estos animales te permitirá apreciar su verdadero tamaño y tomar fotografías increíbles. Además, al finalizar el recorrido, tienes la opción de dejar una propina voluntaria a los guías, quienes se encargan de cuidar a estos fascinantes animales.