Convento Santo Domingo (Cuzco)

El Convento Santo Domingo es un lugar imprescindible para visitar en Cuzco. Construido sobre el templo de Coricancha en 1633, este impresionante edificio sufrió daños graves durante el terremoto de 1950, pero fue restaurado para su pleno esplendor en 1680. Antes propiedad de Francisco Pizarro, fue entregado a la orden de los dominicos para la construcción del convento y la iglesia. ¡Definitivamente vale la pena una visita!

Ubicado cerca de la Plaza de Cuzco, el Convento Santo Domingo es una estructura histórica y arquitectónica fascinante. Su belleza y rica historia atraen a los visitantes de todo el mundo. Además, su plaza interior es un lugar encantador que te transportará a través del tiempo. Aunque modesto en estilo, este lugar tiene una importancia cultural y religiosa invaluable.

A pesar de los desafíos que ha enfrentado durante la pandemia, la visita exterior y los hermosos jardines aún están disponibles. Aunque no se puede acceder al interior actualmente, no te pierdas la oportunidad de admirar esta joya arquitectónica desde el exterior. Además, si tienes la oportunidad de visitar el interior en otro momento, podrás apreciar el Templo del Sol de los incas y las impresionantes piedras que se encuentran en su interior. Desde el guía informativo hasta cada rincón explorado, esta experiencia será inolvidable.

El Convento Santo Domingo es mucho más que una mera atracción turística. Su magia te envolverá al cruzar la puerta y caminar por sus pasillos. Cada espacio cuenta una historia que te cambiará la forma de ver el mundo. No te pierdas la ocasión de visitar la iglesia también, especialmente los domingos cuando podrás asistir a una misa y entrar de forma gratuita. Además, una visita nocturna con la iluminación artificial añade un toque espectacular a este increíble lugar.

Visitar el Convento Santo Domingo significa comprender profundamente la historia de la conquista de América. Es un recordatorio impactante de la matanza y destrucción de las culturas indígenas. A través de sus pisos, paredes y templos, podrás apreciar y entender la historia de aquellos pueblos que sufrieron la conquista y los sacrificios necesarios para preservar su legado. No hay mejor manera de aprovechar un viaje a Perú que comprendiendo y apreciando la inmensidad de su historia.